Morante de la Puebla se presentó por
segunda ocasión en la feria y nuevamente tuvo una tarde difícil. Su primer
astado fue protestado por el público por falta de fuerza y lo sustituyó uno de
Begoña que sirvió de poco. A pesar de que el torero español mostró esfuerzo su
labor fue silenciada. Con su segundo, la historia fue la misma y tras dos
pinchazos recibió los pitos de la afición hidrocálida.
Octavio García “El Payo” estuvo muy
por encima de su primer astado y dejó buenas sensaciones por el pitón izquierdo.
Al final de la faena acortó distancias mostrándose muy valiente y, con una buena
estocada, cortó el primer apéndice de la tarde. Con su segundo, el torero
queretano estuvo muy firme y aguantó las miradas del astado, situación que caló
fuerte en el tendido. Tras una estocada, “El Payo” fue por el descabello y cortó
una oreja más por lo que salió a hombros.
Por último, Diego Silveti se topó
con un toro noble que fue bien al capote. Con la muleta, el torero de dinastía
tuvo grandes pasajes por el pitón derecho al realizar pases muy largos y a baja
altura. Por el pitón izquierdo, el astado protestaba por lo que el matador de
Irapuato volvió a realizar su faena por el lado derecho. Remató la faena con
manoletinas antes de realizar una estocada defectuosa que hizo que se le fuera
la oreja de las manos. El toro recibió el arrastre lento.
Con el último de la tarde, Diego
Silveti comenzó bien toreando a la verónica, sin embargo, el astado sufrió una
fea voltereta que lo lastimó y alteró las grandes condiciones que mostró al
comienzo de la lidia. Con la muleta, Silveti se mostró voluntarioso pero el daño
que sufrió el de Mimiahuapan fue irreversible por lo que la labor del torero fue
breve.
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