Wednesday, April 27, 2016

Aguas.

En tarde preciosa de sol y clima insuperables, el cartel fue rematado con la presencia de Morante de la Puebla y Diego Silveti. Ante tres cuartos de entrada en sol y casi lleno en sombra para ver el encierro de Teófilo Gómez, de justa y preciosas hechuras, una corrida con clase y con la fuerza y bravura al límite, donde destacó el primero, que tuvo condiciones.
 
En tarde preciosa de sol y clima insuperables, el cartel fue rematado con la presencia de Morante de la Puebla y Diego Silveti. Ante tres cuartos de entrada en sol y casi lleno en sombra para ver el encierro de Teófilo Gómez, de justa y preciosas hechuras, una corrida con clase y con la fuerza y bravura al límite, donde destacó el primero, que tuvo condiciones.
 
Dos faenas distintas, que hicieron relucir las condiciones de un lote que él, solo supo descubrir, Los pinchazos al primero y uno al segundo, le privaron de cortar cuatro orejas en esta tarde.
 
Morante de la Puebla no tuvo lo que necesita un torero de su corte, para verlo acariciar el toreo, enfrentó a dos toros deslucidos, sosos y sin sustancia, aunque el diestro sevillano puso todo de su parte fue silenciado en su primero y escuchó dos avisos en su segundo.
 
Debido a la falta de colaboración de sus astados, el sevillano regaló un toro de la misma ganadería con el que realizó una faena de las suyas, aunque esta vez mas determinante y valiosa por su manera de jugarse la vida en todo momento con un toro que aunque iba y transmitía, rebañaba en cada pase, lo extraño de esta faena fue verle cogido y en el piso pero eso solamente hizo que la afición entrará más en extasis, el maestro de la Puebla ligó derechazos incomensurables y emotivos, con la afición entregada al máximo que le coreo con mucha fuerza su faena y a pesar de un pinchazo le fue entregada una oreja.
 
Por su parte Diego Silveti vino a decir que quiere meterse en el gusto de la afición hidrocálida. Se fue a recibir a su primero a porta gayola, sufriendo un esguince en el tobillo derecho; el toro salió incierto y lo arrolló
 
.
Con la muleta el toro acusó estar lastimado de los cuartos traseros y no pasó nada en la faena del diestro guanajuatense, que dejó dos pinchazos y una media estocada poco caída, posteriormente se metió a la enfermería donde le infiltraron el tobillo para poder salir a lidiar al sexto de la tarde.
 
El sexto fue el toro más hecho de la corrida, un toro que pasaba, pero sin decir mucho, Silveti lo toreó a pies juntos de buena forma con el capote y le realizó un quite de chicuelinas en los medios, con la muleta en la mano le ligó varias tandas por los dos pitones sin embargo no pudo transmitir como se esperaba, finalizó con una estocada tendida y un descabello para ser ovacionado.

 
 
 


 
 

No comments:

Post a Comment